Según Romanos 5:8, Dios muestra su amor por nosotros al enviar a su Hijo a morir por nosotros, aun cuando éramos pecadores.
Romanos 5:8 dice: «Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros».
Romanos 5:9 dice: «Mucho más ahora, habiendo sido justificados por su sangre, por medio de él seremos salvos de la ira».