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7 COSAS QUE PUEDES HACER TÚ PARA CAMBIAR EL MUNDO
- Intenta focalizar en las cosas buenas, no en las malas.
- Cuídate y cuida a la gente de tu alrededor.
- No olvides lo que no ves pero existe.
- Usa tu sentido de la empatía.
- Nunca te olvides de respetar a los demás.
- No uses el «no puedo»
- Cuida el entorno que pisas.
Si yo cambio, mi mundo cambia
En Coaching hace algún tiempo aprendí una frase que viene muy bien para estos momentos: “A lo mejor yo no puedo cambiar el mundo pero lo que sí está claro, es que si yo cambio, mi mundo cambia y cambia mi entorno”
Estamos en un año complicado a nivel social, económico y sobre todo a nivel salud, hoy valoramos más que nunca la vida, las relaciones, la cercanía de los que más queremos.Según oímos las expectativas para lo largo del año no son muy alentadoras. Estamos viviendo una época de miedo, con mucha incertidumbre e inseguridad. No sabemos qué va a pasar y en ocasiones como actuar incluso cómo gestionar lo que se nos viene encima.
Pero, si analizamos la situación, ésta ya se ha vivido de diferentes maneras y magnitudes, con pestes y pandemias de otros tipos a lo largo de la historia de la humanidad. Realmente, ¿qué es una crisis? No quiero responder a esta pregunta por mí misma, quiero compartir contigo lo que hace algún tiempo escribió un gran genio Albert Einstein.
Él dijo: “No pretendamos que las cosas cambien, si siempre hacemos lo mismo. La crisis es la mejor bendición que puede sucederle a personas y países, porque la crisis trae progresos. La creatividad nace de la angustia, como el día nace de la noche oscura. Es en la crisis que nace la inventiva, los descubrimientos y las grandes estrategias. Quien supera la crisis, se supera a sí mismo sin quedar superado. Quien atribuye a la crisis sus fracasos y penurias, violenta su propio talento y respeta más a los problemas que a las soluciones. La verdadera crisis, es la crisis de la incompetencia. El inconveniente de las personas y los países es la pereza para encontrar las salidas y soluciones. Sin crisis no hay desafíos, sin desafíos la vida es una rutina, una lenta agonía. Sin crisis no hay méritos. Es en la crisis donde aflora lo mejor de cada uno, porque sin crisis todo viento es caricia. Hablar de crisis es promoverla, y callar en la crisis es exaltar el conformismo. En vez de esto, trabajemos duro. Acabemos de una vez con la única crisis amenazadora, que es la tragedia de no querer luchar por superarla”
Sabias palabras que comparto contigo para que te preguntes que puedes hacer con ellas.